El verano nos pisa los talones y parece que este año, aunque podamos movernos por comunidades, tendremos que tomar algunas medidas para no contagiarnos de Covid-19 o dengue. Sin embargo, el ser cautos no implica que no podamos disfrutar de nuestras vacaciones de verano y podamos hacer planes con los que salir de la rutina y desconectar del día a día. Por ello, muchas familias y grupos de amigos se plantean el alquiler vacacional en zonas de playa.
En un principio, el alquiler vacacional en la playa no es muy distinto de un alquiler para una vivienda normal. Ten en cuenta que estos alquileres están muy sujetos a temporadas y estacionalidad, por ello para evitar pagar la novatada ten en cuenta las siguientes cuestiones:
Elegir una casa que se adapte a tus necesidades, por ello el portal o la web donde las busques es muy importante. En Cubisima contamos con variedad de anuncios actualizados. Asegúrate de que cuenten con imágenes con todo lujo de detalles y una descripción lo más detallada posible. Y si puedes, ve a verla en persona. Entiendo que esto no siempre es posible por la ubicación geográfica. Pero ahora hay herramientas con las que podemos ver el interior de las viviendas en tiempo real, como son las videollamadas. Antes de dar el paso final y firmar el alquiler, asegúrate de que tienes toda la información necesaria y los detalles para evitar sorpresas de última hora.
Asegúrate de qué ubicación o localización exacta buscas. Por experiencia huye de esos anuncios de «a pocos metros de la playa». Normalmente, esos pocos metros acaban siendo algunos kilómetros. No te fíes de la información ambigua. Piensa que las casas en ciudades costeras, no tienen por qué estar en primera línea de playa, ni muchísimo menos. Por ello, no te cortes a la hora de pedir explicaciones exacta sobre la ubicación de la casa o piso.
A la hora de buscar casas siempre te topas con dos opciones: agencias y particulares. En estos casos, la diferencia se encuentra en encontrar alguien responsable, que así lo demuestre durante todo el proceso, sin riesgo a que te deje colgada. Y, sobre todo, ante cualquier imprevisto los días en los que estés alojada en la vivienda, pudiendo solucionarte los problemas. Cuando se trata de alquiler a particulares corremos el riesgo de encontrarnos con estas situaciones ¡Ojo! Esto no quiere decir que todos los particulares que alquilan sus casas en la playa sean iguales.
Muy importante el contrato y su firma. Como arrendatario, para evitar problemas, asegúrate de que la vivienda está dada de alta y cumple todos los requerimientos legales.
Respecto al pago, necesitarás pagar una señal antes de entrar a la casa. Esto es algo ineludible, como también lo es la fianza. Para hacerlo de forma segura, necesitas registrar por escrito estos pagos.
Por último, debes saber que en algunas viviendas vacacionales que se alquilan por semanas o días, se incluyen gastos de limpieza o servicios extra como minibar y acceso a piscinas. Estos pagos, también deben constar en el contrato de alquiler para poder recurrir a ellos de forma legal, en caso de ser necesario.
Dicho esto, ponte manos a la obra y busca la casa de tus sueños para veranear este año.
Con información de The Princess Gown